¿Querés adelgazar? Esto es lo que debés hacer antes de empezar una dieta y una rutina de ejercicios

A veces, alcanzar el peso ideal es un desafío que muchas personas enfrentan día a día. Sin embargo, el camino hacia la pérdida de peso puede ser complejo e, incluso, frustrante. 

Según el destacado paleoantropólogo y catedrático de la Universidad de Harvard, Daniel Lieberman, existe una razón biológica que dificulta la pérdida de peso a largo plazo. 

La verdadera razón por la que es difícil bajar de peso
En un artículo reciente de El Confidencial, que remite a una nota publicada en la CNN, Lieberman destaca que nuestro organismo está evolutivamente diseñado para acumular y retener grasa, lo que puede explicar en parte el fenómeno del efecto rebote tras conseguir reducir kilos.

La comprensión de esta dinámica biológica puede ser crucial antes de embarcarse en una dieta o una rutina de ejercicios. Es necesario reconocer que tratar el sobrepeso va más allá de simples decisiones alimenticias y actividades físicas. 

De hecho, Lieberman sugiere que entender la naturaleza de nuestro cuerpo y sus mecanismos de acumulación de grasa puede ser fundamental para abordar de manera efectiva la pérdida de peso a largo plazo.

La visión evolutiva nos revela que la delgadez no es el mejor destino para todos. La grasa corporal es vital para nuestra supervivencia, ya que cumple funciones esenciales incluso en apariencia delgada. 

Nuestra especie ha evolucionado para almacenar grasa. Es necesaria para sostener las funciones de nuestro cerebro e incluso nuestro ciclo reproductivo costoso. 

Sin embargo, el exceso de grasa, especialmente en el abdomen, puede indicar problemas de salud y requerir cambios en nuestro estilo de vida.

Las fluctuaciones de peso dentro de un rango normal son normales y se deben principalmente al equilibrio de líquidos en el cuerpo. A lo largo de la historia, hemos experimentado ciclos de acumulación y consumo de grasa basados en la disponibilidad de recurso. Este punto influye en nuestra percepción de las variaciones de peso.

Al decidir entre dieta y ejercicio para perder peso, ambos son cruciales, pero por razones diferentes. Mientras que la dieta puede tener un impacto más inmediato en la pérdida de peso, el ejercicio previene el aumento de peso futuro y conlleva beneficios para el bienestar físico y mental. 

Ajustar nuestro entorno moderno para facilitar decisiones saludables es esencial para alinear nuestras necesidades biológicas con las condiciones de vida actuales.

Varios consejos prácticos y fáciles para tener un peso saludable 
Con pequeños pasos y decisiones inteligentes, vas a poder llegar a tu peso deseado. Acá te dejamos algunos consejos prácticos para comenzar tu viaje hacia un peso saludable con el pie derecho:

Educate sobre nutrición: informate sobre qué alimentos son más beneficiosos para tu salud y cuáles deberías limitar en tu dieta.

Planificá tus comidas: preparar tus comidas con antelación puede ayudarte a evitar tentaciones y a mantener una alimentación más saludable.

Buscá apoyo: no tengas miedo de pedir ayuda a amigos, familiares o profesionales de la salud en tu viaje hacia un peso saludable.

Establecé metas realistas: fijate objetivos alcanzables y celebrá cada logro en el camino.

Movete más: buscá maneras de incorporar más actividad física en tu rutina diaria, ya sea caminando más, haciendo ejercicio o practicando un deporte que te guste.

Dormí lo suficiente: el descanso adecuado es crucial para mantener un peso saludable y una buena salud en general.

Controlá tus emociones: Muchas veces comemos por estrés, aburrimiento o tristeza. Aprendé a identificar tus emociones y buscar alternativas saludables para manejarlas.

No te castigues por los errores: todos cometemos deslices en el camino, lo importante es aprender de ellos y seguir adelante con determinación.

Celebrá tus victorias: cada paso hacia un peso saludable es motivo de celebración, así que no olvides reconocer tu progreso y felicitarte a ti mismo/a por ello.

Fuente: El Cronista