Reglas básicas para mantener frescos y sabrosos los alimentos sobrantes de las Fiestas
ALIMENTACIÓN Y SALUD Ivana ALFAROLa correcta conservación de los restos de comida durante las fiestas es clave para prevenir problemas de salud. Desde el enfriamiento adecuado de los alimentos hasta las prácticas seguras de almacenamiento, seguir algunas reglas específicas resulta fundamental para evitar enfermedades transmitidas por los alimentos.
Las celebraciones de Navidad y fin de año se caracterizan por platos abundantes y momentos compartidos alrededor de la mesa, que suelen dejar acumulados restos de comida. Estas delicias festivas, si se manipulan correctamente, pueden ser disfrutadas de nuevo sin riesgos.
Consejos para almacenar los alimentos sobrantes de forma segura
Según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos, los alimentos cocidos no deben permanecer a temperatura ambiente durante más de dos horas para evitar la proliferación de bacterias. Para acelerar su enfriamiento antes de almacenarlos, se sugiere colocarlos al aire libre hasta por 30 minutos o aplicar agua fría en la base de los recipientes. Enfriar rápidamente los alimentos es esencial para garantizar su seguridad alimentaria.
El mantenimiento de la cadena de frío es fundamental para garantizar la seguridad de los alimentos. Según Mónica Herrero, miembro del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas y vicepresidenta del Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Aragón, el frío ralentiza el crecimiento de microorganismos. Por ello, las sobras deben almacenarse en la heladera a una temperatura de 4°C o menos, como indica la FDA, y congelarse si no serán consumidas en las siguientes 48 horas.
Olivia Roszkowski , instructora chef de artes culinarias saludables en el Instituto de Educación Culinaria de Nueva York, recomienda el uso de recipientes herméticos y poco profundos para almacenar los alimentos. Estos recipientes favorecen una disminución uniforme y rápida de la temperatura, preservan la calidad de los alimentos y reducen el riesgo de contaminación cruzada.
Congelar los alimentos es una opción eficaz para prolongar su conservación. Las sobras que no se consumirán en pocos días deben almacenarse en el freezer, donde pueden mantenerse en buen estado hasta tres meses, siempre que estén correctamente selladas y etiquetadas.
La licenciada en Nutrición Eugenia Briz (MP 95) recomendó, en una nota a Infobae, etiquetar las sobras con la fecha de envasado. Esta práctica permite llevar un control del tiempo de almacenamiento y asegura que los alimentos se consuman antes de que pierdan su frescura.
Evitar introducir alimentos calientes en el refrigerador es crucial para mantener la seguridad alimentaria. Olivia Roszkowski advirtió que guardar comida caliente eleva la temperatura interna del aparato, lo que puede afectar a otros alimentos almacenados. Por esta razón, es preferible enfriar los platos antes de colocarlos en el frigorífico.
Dividir las sobras en porciones pequeñas. Según Herrero, fraccionar los alimentos en recipientes pequeños facilita un enfriamiento más rápido y uniforme. Esto reduce el riesgo de que los alimentos entren en la zona de peligro de temperatura.
Manipular los alimentos con utensilios y manos limpias. La higiene es crucial para evitar la contaminación. Leana Wen, médica y profesora clínica adjunta en la Universidad George Washington, recordó la importancia de lavar utensilios, superficies y manos antes de manipular sobras o prepararlas para el almacenamiento.
Estas medidas preservarán el sabor y calidad de los alimentos, además de reducir el riesgo de enfermedades transmitidas por alimentos.
Cuánto tiempo se conservan los alimentos sobrantes
El tiempo que las sobras pueden mantenerse aptas para el consumo varía según el tipo de alimento. De acuerdo con la licenciada en Nutrición Ana Chezzi (MN 2245), es fundamental refrigerar los alimentos cocidos inmediatamente después de enfriarlos, ya que carnes, pescados y guisos pueden durar de dos a cuatro días en la heladera, mientras que las ensaladas ya condimentadas tienen un máximo de 24 horas. Las sobras congeladas, en cambio, pueden conservarse hasta tres meses si se almacenan correctamente.
Mantener la heladera a una temperatura de 4°C o menos, como recomienda la FDA, es esencial para frenar el desarrollo de bacterias. Además, la organización recalca que alimentos perecederos deben estar siempre en el refrigerador o congelador, evitando su exposición prolongada a temperaturas entre 4°C y 60°C, el rango ideal para la proliferación bacteriana.
Cómo puede afectar la salud una mala conservación
Una mala gestión de los alimentos sobrantes puede derivar en intoxicaciones alimentarias, como la salmonelosis o infecciones por Escherichia coli. Estas enfermedades, como advirtió Briz, pueden causar síntomas como diarrea, vómitos, calambres abdominales y fiebre, e incluso complicaciones graves en personas vulnerables como niños, ancianos o individuos con sistemas inmunitarios debilitados.
Los factores que contribuyen a estas intoxicaciones incluyen la contaminación cruzada y el almacenamiento inadecuado. En este punto, Wen enfatizó la importancia de utilizar utensilios limpios y separados para carnes crudas y otros alimentos, así como lavarse las manos rigurosamente antes de manipularlos. Además, recordó que personas con síntomas gastrointestinales no deben preparar alimentos para evitar la propagación de patógenos como el norovirus.
Otro aspecto crucial es el tiempo que los alimentos permanecen fuera del refrigerador. En verano, especialmente cuando las temperaturas superan los 32°C (90°F), la regla de las dos horas se reduce a una. Como señaló Herrero, “es mejor guardar los alimentos en raciones pequeñas para facilitar su enfriamiento rápido y evitar su desecho”.
Conservar correctamente los alimentos no solo prolonga su vida útil, sino que protege la salud de los comensales. Las Fiestas son una ocasión para celebrar y compartir, y hacerlo con alimentos bien cuidados garantiza que estos recuerdos se mantengan gratos y seguros.
Fuente: Infobae