Cocinar con Airfryer: conoce las ventajas y errores comunes

Hace años, cuando nuestros antepasados cocinaban al fuego los pocos alimentos que había, era inviable pensar en llegar a tener sobre la mesa platos que han sido hechos por máquinas. Sí, es verdad que nos encargamos de darle a los robots de cocina todo los ingredientes que necesita para elaborar lo que queremos comer, pero a día de hoy son estos aparatos los que nos ayudan a preparar la comida, como la Airfryer.

Nuestra cocina seguramente esté equipada por una batidora, exprimidor, picadora, cafetera, etc., pero una Airfryer es el utensilio que a día de hoy más ventas está teniendo. ¿La razón? Con ella es muy fácil hacer cualquier tipo de receta. Una freidora de aire es básicamente un electrodoméstico que utiliza una fuente de calor potente en la parte de arriba (como un 'mini grill') y un potente ventilador que hace que el aire caliente circule alrededor del alimento, haciendo que la parte de afuera del mismo se endurezca ligeramente, y generando esa sensación de alimento crujiente que se obtiene con las frituras tradicionales.

 Es decir, un electrodoméstico que deja los alimentos como si estuvieran fritos, pero con una cantidad mínima de grasa.

Sara y Ani, de Fit Happy Sisters, cuentan que su uso «es completamente seguro», como un horno convencional, entonces lo que tienes que preguntarte es si es un electrodoméstico útil para ti, ya que no a todo el mundo tiene por qué servirle. Como su nombre indica, se trata de una máquina para freír con aire, en lugar de con aceite, y abre un mundo nuevo de posibilidades a la hora de cocinar. «En una freidora de aire puedes cocinar prácticamente cualquier tipo de plato: recetas para picar entre horas, almuerzos, cenas, desayunos, meriendas… Todo hecho con la freidora de aire, y todo, por supuesto, saludable», dicen las expertas autoras de 'Recetas saludables con Airfryer'.

Ventajas
Ahorro de energía, especialmente en comparación con un horno.
Se cocina de forma saludable, ya que se cocina con poco o nada de aceite.
No deja olores.
Cocina rápido.
Es segura. No te salpica aceite.
Es fácil de usar.
Es portátil. Puedes cocinar en cualquier lugar donde haya un enchufe.
Cocinar en Airfryer no da calor a la casa.
Para sacarle el máximo provecho a tu freidora de aire, debes tener en cuenta algunas cosas que te ayudarán a cocinar diferentes tipos de preparaciones. Tal como cuentan las expertas, «es muy fácil de encender y se calienta en un minuto. Solo tienes que poner dentro lo que vas a cocinar, ajustas tiempo y temperatura y listo. Cocina sin ensuciar la cocina, sin humos y sin olores», y existen una serie de accesorios interesantes de conocer que te ayudarán a hacer diferentes preparaciones en tu freidora de aire: moldes, recipientes, moldes de muffins, rejillas, pinzas…

«Lo que tienes que saber es que cualquier molde que puedas meter en el horno o en el microondas, lo puedes meter en la Airfryer, y que el papel de horno y el papel de aluminio también te serán muy útiles para evitar que la comida se pegue y para ensuciar menos tu freidora de aire», dicen. Solo tienes que tener en cuenta que el papel de horno no debe estar cerca de la parte de arriba porque podría quemarse, como ocurre en un horno convencional.

Pese a que muy útil y muy fácil de usar, existen algunos errores comunes que hacen que esta máquina pueda parecer un mala compra...

Errores
llenarla demasiado.
No mover la comida a mitad de cocción.
Pensar que solo sirve para hacer patatas y otros tipos de alimentos que normalmente se fríen.
Poner a cocinar cosas que no debes meter en una freidora de aire (líquidos, sopas, bizcochos muy altos...).
Pegarla mucho a la pared mientras está en marcha.
Olvidarte de precalentar (en algunas preparaciones).
No quitar la rejilla en algunas recetas.
No lavarla

Fuente: abc