Se inyectó su propio semen como remedio casero para aliviar el dolor de espalda

La aplicación le provocó una peligrosa infección y debió ser internado en una clínica.

SALUD Julia VOSCO
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Un joven tuvo que ser hospitalizado de urgencia luego de sufrir una descompensación producto de una herida que tenía en el brazo. Sucedió en Irlanda y la situación tomó por sorpresa a todos los especialistas del lugar.

En primera instancia, el chico pidió ayuda médica por un dolor lumbar severo y repentino a causa de haber levantado demasiado peso tres días antes. Al ser asistido, los doctores notaron una llamativa herida en uno de sus brazos que se veía enrojecida e inflamada. Le indicaron varios exámenes de rutina, incluida una placa con contraste, y las imágenes evidenciaron que había líquido alojado en la zona.

Ante este problema, el paciente terminó revelando que se inyectaba su propio semen en el brazo para tratar de forma casera su malestar. Al parecer, lo hizo durante 18 meses, y se aplicaba el fluido una vez al mes por medio de una jeringa que había adquirido por internet y que no cumplía con las condiciones de higiene adecuadas.

A través de una radiografía descubrieron que tenía un enfisema subcutáneo y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.

La opinión de un especialista
“Se trata de aire alojado debajo de la piel y usualmente se va solo. Es probable que también haya sufrido una infección por gérmenes mixtos debido a las inyecciones que se aplicaba con semen”, explica a Con Bienestar el doctor Nahuel Elías (M.N. 141.542), especialista en clínica médica y emergentología.

La verdadera forma de tratar la lumbalgia
El dolor de espalda es la consulta de guardia más frecuente en el mundo. “Se soluciona con analgésicos y es importante saber que algunas dolencias ameritan estudio de imágenes y otras no”, asegura Elías.

Se recomienda preservar la zona y cuidar de no volver a traumatizarla levantando peso sin protección. “Si a pesar del tratamiento, la afección dura más de seis semanas se interpreta como crónico y el diagnóstico será otro”, concluye.

Para su suerte, el joven no sufrió complicaciones mayores y luego de la intervención fue dado de alta. Nunca reveló cómo fue que se le ocurrió semejante idea y se difundió este caso para enseñar acerca de los peligros de experimentar con una herida o dolencia. Siempre hay que consultar al médico.

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