Los 10 beneficios mentales de jugar al tenis, el deporte que alarga la vida

En tiempos de Juegos Olímpicos es un placer ver a los atletas llevar su cuerpo y mente al extremo para lograr marcas que los hagan alcanzar el podio y sus medallas.

Uno de los deportes favoritos de esta competencia es el tenis. Los JJOO París 2024 nos dieron la oportunidad de disfrutar de Rafael Nadal, Carlos Alcaraz y Novak Djokovic, entre otros, haciendo explotar los estadios con cada partido.

Según la Asociación de Tenis de los Estados Unidos (USTA), este es uno de los deportes más completos que existen. Físicamente, favorece la flexibilidad, fortalece la musculatura y los huesos. También es beneficioso para la salud cardiovascular, ya que al tratarse de un ejercicio aeróbico mejora el entorno cardíaco y respiratorio. Solo jugar 3 horas a la semana puede reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular en un 56 por ciento, según datos de USTA.

La novedad es que también es excelente para la salud mental y se lo considera el deporte perfecto para un envejecimiento saludable, porque combina estrategia, agudeza mental y socialización.

Los beneficios de esta disciplina deportiva tan popular no se producen sólo a nivel físico, sino también mental, explicó a Infobae el doctor Conrado Estol, médico neurólogo especializado en accidentes cerebrovasculares (ACV).

“En un estudio cardíaco de la ciudad de Copenhague (Copenhagen City Heart) evaluaron a una cantidad grande de personas durante 25 años, y el 66% practicaban algún deporte. El 12% era gente sedentaria. Se compararon estos deportes y se vio que el tenis, con un promedio de juego de dos horas semanales, era el que más expectativa de vida lograba, haciendo que la persona ganara 9,7 años, casi diez años más de vida”, describió el doctor Estol.

Según la Fundación Española del Corazón, este estudio prospectivo cardiovascular empezó en 1976 con el objetivo de describir las asociaciones entre los diferentes niveles de actividad física practicada en el tiempo libre y las causas de las muertes posteriores. Dicha investigación incluyó 19.329 personas sanas entre 20-93 años.

El doctor Estol explicó: “El deporte que menos expectativa de vida produjo fue ejercitarse en el gimnasio, con 1,7 años. Luego, el bádminton, el golf y el fútbol hacían ganar 5 a 6 años de expectativa de vida, mientras que correr, nadar y el ciclismo tenían una ganancia promedio de 3 años”.

La conclusión de este estudio, dijo el médico, es que por un lado, “el tenis, con poco tiempo de práctica, supera mucho a los demás deportes y lo que más lo hace diferenciar es su fuerte componente social, lo que se relaciona con la mayor expectativa de vida que otorga”.

¿Y qué ocurre con otros deportes? “El golf, por ejemplo, también permite socializar pero es mucho menos efectivo que el tenis, ya que implica una caminata, que es un buen ejercicio, pero no de la intensidad del tenis. Y sabemos que acelerar el corazón, la fase aeróbica del ejercicio, es muy importante para la salud cardiovascular. Entonces el golf, en este aspecto, falla”, señaló el neurólogo.

En cuanto al fútbol, tiene el componente social, pero es común que las personas se lesionen jugando al fútbol. “Por eso no son tantos los años de la vida en los que se puede jugar. Como ejercicio es bueno físicamente; es bueno socialmente; pero más limitado por las lesiones y en especial después de cierta edad en los hombres. El tenis nuevamente tiene una mucho menor incidencia de lesiones”, dijo el experto.

Los beneficios para la salud mental
La Asociación de Tenis de los Estados Unidos aseguró que el tenis es un deporte que brinda muchos beneficios más allá de la salud y la actividad física. Particularmente importantes son los efectos positivos de este deporte en la salud mental:

1. Disminuye el estrés. “Hay evidencia con respecto al tenis de que puede brindar un efecto emocional positivo al influir en la salud mental de las personas, disminuyendo el estrés y aumentando la resiliencia”, dijo el doctor Estol.

2. Enseña resiliencia. El licenciado Pablo Sucarrat, psicólogo deportivo, entrenador de fútbol y docente, explicó a Infobae en una nota reciente que la resiliencia es una habilidad que tienen todos los seres humanos, pero que hay que entrenarla. “Hay que ir teniendo pequeñas dosis de frustración, que sean tolerables, desde los pequeños años de formación. Hoy nadie quiere frustraciones, sin embargo, hay que ir atravesando por esas pequeñas dosis de tolerancia a la frustración para generar una resiliencia mayor”.

Connor Frazier, ex jugador de tenis universitario y profesor de tenis profesional en el Liberty Park Tennis Center en Salt Lake City, Utah afirmó al sitio estadounidense Well+good: “Compites principalmente contra ti mismo”. “Y aunque haya alguien más del otro lado de la red a quien intentas vencer, al final del día, tienes que jugar el mejor tenis para ti. Aprendes que puedes perder y aun así jugar muy bien y puedes ganar y jugar muy mal”. Esto es resiliencia.

3. Permite desarrollar la concentración. El tenis, en cualquier nivel, requiere concentrarse en la pelota amarilla. Por lo tanto, sí o sí, se dejan de lado preocupaciones y la atención plena está puesta en ella. Puede servir como una increíble meditación en movimiento.

“La meditación en movimiento permite conectarte con el momento presente de una manera muy completa y puede detener la rumiación que ocurre en la mente”, dijo a Well+good Noelani Rodríguez, terapeuta de artes creativas.

Del mismo modo que las técnicas de meditación tradicionales, una meditación en movimiento puede reducir el estrés y ayudar a sentir mayor bienestar mental.

4. Ayuda a superar la depresión. “Hay estudios que han demostrado que el tenis puede disminuir síntomas de depresión, y que en personas jóvenes puede aumentar su confianza y autoestima”, comentó el neurólogo Estol.

5. Favorece a los más chicos. “En un estudio que se realizó en niños de 8 a 12 años, los que jugaron más de un año al tenis tuvieron mayor flexibilidad cognitiva y memoria de trabajo que los que entrenaron durante menos de un año. Es decir, el tenis se asociaba con mejoras en lo que son las funciones ejecutivas del lóbulo frontal, que son aquellas que usa el cerebro para programar, organizar y llevar a cabo acciones”, afirmó el doctor Estol.

De acuerdo a USTA, “el tenis promueve el trabajo en equipo y el espíritu deportivo, mejora la coordinación, la agilidad y el equilibrio, desarrolla el pensamiento estratégico y la resolución de problemas, ayuda a cultivar habilidades sociales y profundiza la confianza en sí mismo”.

6. Mayor agilidad para los +70. “Los jugadores de tenis que están en la séptima década han mostrado, en comparación con no jugadores, una velocidad de procesamiento mental reflejada en tiempos de reacción más rápidos que los sedentarios”, señaló el médico.

7. Promueve una mentalidad de crecimiento. Este es uno de los mejores beneficios del tenis: sin importar el nivel al que se llegue, siempre se está aprendiendo algo nuevo. Para muchos jugadores esto significa pasar horas investigando y trabajando en nuevas técnicas. El desafío de mejorar y alcanzar metas personales produce bienestar mental.

Graeme Cox, profesional del tenis certificado y entrenador asistente del equipo de tenis masculino de la Universidad de Utah dijo a Well+good: “Siempre hay margen de mejora, lo que creo que mentalmente es genial porque te mantiene alerta”.

8. Es el deporte social por excelencia, debido a su capacidad para facilitar conexiones entre personas de distintos ámbitos. A diferencia de otras actividades, el tenis tiene una cultura de socialización incorporada, con oportunidades para conversar entre partidos, participar en campeonatos y relacionarse. En resumen, este deporte no solo es una forma de ejercicio, sino también una forma efectiva de socializar y divertirse.

9. Es una actividad excelente a medida que se envejece porque combina aptitud física, agudeza mental y socialización. Investigaciones recientes mostraron que los tenistas mayores tienen un menor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, obesidad y depresión.

“Verás jugadores que jugaron a un nivel muy alto en su juventud, que ahora tienen 70 u 80 años, y obviamente no están practicando al mismo nivel, pero todavía les encanta jugar y han encontrado gente con quien hacerlo”, dijo Cox.

10. Favorece el contacto con el aire libre y la naturaleza. La simple acción de jugar al tenis tiene efecto antiestrés y puede ayudar a mejorar el estado de ánimo. Las investigaciones han descubierto que disfrutar de la naturaleza puede inducir más ondas alfa en el cerebro, asociadas a la relajación.

Un informe titulado “Espacios verdes y azules y salud mental” de la Organización Mundial de la Salud demostró que pasar tiempo en la naturaleza (incluidas las zonas urbanas y periurbanas) mejora la salud mental.

Antes de salir a la cancha
Una publicación de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), en México, recomienda que una de las claves para generar el hábito de hacer ejercicio es elegir una actividad que resulte divertida y se disfrute hacer. En el caso de optar por el tenis, lo principal es conseguir el profesor y el espacio donde desarrollar la actividad. Recomendaciones:

Llevar ropa y calzado cómodos. Optar por zapatillas que brinden un buen soporte y que no tengan suelas negras, que pueden marcar la cancha.
Hidratarse, beber agua con frecuencia
Protegerse del sol (utilizar protector solar y gorra)
La alimentación es clave para el rendimiento, así que es recomendable seguir una dieta saludable
Hacer siempre una fase de calentamiento y estiramiento para evitar las lesiones

Fuente: Infobae