La especia protagonista que es eficaz para tratar el síndrome del intestino irritable y mantener a raya el colesterol
POR UNA VIDA MÁS SALUDABLE Julia VOSCOEs un ingrediente protagonista de la cocina en diversas culturas del mundo; desde la mediterránea, hasta la india, pasando por la árabe y la mexicana. Es la especia que hace del curry un plato delicioso y la que da a las fajitas mexicanas su sabor distintivo. El comino es un elemento culinario versátil dado que, además de elevar un plato, permite estimular el sistema digestivo, actuar como antiinflamatorio y controlar el colesterol, entre otros beneficios.
Según especifica el Instituto de Ciencia McCormick el comino es originario de Irán y la región mediterránea. La referencia más antigua a la especia se remonta hasta 5.000 años atrás cuando era utilizado como ingrediente de momificación de los cuerpos de los faraones egipcios. Una creencia mencionada por la institución es que los novios tendrían una vida feliz si llevaban semillas de comino durante toda la ceremonia nupcial.
En otro orden de cosas, lo que se usa en la cocina de esta planta de la familia Apiaceae son sus pequeñas semillas de color marrón oscuro y textura pajiza que pueden ser consumidas de esa forma o machacadas en polvo. Cabe acotar que por más diminuto que parezca, en el momento de agregarlo a un plato se debe tener cuidado con las cantidades dado que tiene un sabor ligeramente amargo y un olor fuerte y dulzón que impregnan la comida por completo.
También puede ser usado para hacer infusiones simplemente añadiendo agua caliente sobre las semillas y dejándolas reposar por unos minutos. El Ministerio de Agricultura de la Nación revela que, en la Argentina, la utilización gastronómica más frecuente del comino se encuentra en la elaboración de empanadas y pastas cocidas. “Suele tener más importancia en el sector de bebidas. De hecho, existe el licor de comino, que se fabrica con anís y canela”, señala la institución.
Sol Vazquez, licenciada en Nutrición y fundadora del centro de Nutrición Funcional Planta Made añade que la especia se puede cocinar, usar como aderezo, para conservar alimentos o hasta para aromatizar haciendo que los alimentos se enriquezcan sin sumar calorías, grasas saturadas, azúcares o sal. “Puede tostarse o freírse, comerse solo o con otras especias, y se puede machacar al mortero para sacar sus aceites esenciales, o moler por completo”, dice.
Comino: ¿por qué sumarlo a la dieta?
Yael Hasbani, asesora en Dietética y Nutrición Natural, reconoce que aparte de mejorar las características organolépticas de la comida se recomienda su ingesta por la vasta cantidad de propiedades saludables que tiene. Entre las que se destacan mejora de la función digestiva, disminución de la inflamación y control del colesterol. Aparte la profesional menciona su aporte de vitaminas, minerales, flavonoides y terpenoides que son todos compuestos bioactivos antioxidantes.
Aliado digestivo
“Tiene propiedades digestivas porque ayuda a que el sistema digestivo pueda hacer su función correctamente al terminar de digerir los alimentos de una mejor manera e incluso eliminando molestias como dispepsias, gases e hinchazón”, informa Hasbani.
El estudio “Extracto de comino para el control de síntomas en pacientes con síndrome del intestino irritable (SII)” demostró que tras ser consumida durante cuatro semanas por pacientes con SII la especia podría ser una solución eficaz y económica para mejorar la mayoría de los síntomas de malestar.
Combate la inflamación y la oxidación
Son diversas las especias que tienen la capacidad de reducir los niveles de inflamación y oxidación en el cuerpo y el comino no es la excepción. La Lic. Vazquez explica que gracias a sus compuestos el comino es carmintativo –una sustancia que alivia y desinflama el tubo digestivo– lo que lo convierte en un complemento dietético ideal para quienes desean combatir la inflamación. “Como es antioxidante tiene la capacidad de mejorar la salud celular y enfrentar a los radicales libres del cuerpo”, añade Hasbani.
Controla el colesterol
Varias investigaciones han demostrado que el comino puede ayudar a controlar el colesterol. En un estudio publicado en la revista Complementary Therapies in Clinical Practic se vio que el comino en polvo disuelto en yogur demostró una reducción del colesterol “malo” (LDL) y los triglicéridos, al tiempo que aumentó el colesterol “bueno” (HDL).
Por otro lado, aunque personas de todas las edades disfrutan de su consumo, existen ciertos casos en los que se tiene que ser precavido. El sitio médico WebMD advierte sobre su ingesta en personas con alergias, en mujeres en situación de lactancia y embarazo e individuos con trastornos hemorrágicos ya que la especia podría retardar la coagulación sanguínea. No obstante, a nivel general sostiene que “es seguro utilizar comino en polvo y aceite esencial de comino como tratamiento”.
Finalmente, Hasbani sugiere guardar la especia en un lugar fresco o seco alejada de fuentes de calor o de la luz directa del sol, porque al tener propiedades antioxidantes el sol y el oxígeno pueden ejercer una acción negativa sobre su composición.
Fuente: La Nacion