El limón es un cítrico de sabor ácido, de cáscara gruesa y muy aromática. Contiene la misma cantidad de vitamina C que la naranja y además, tiene ácidos orgánicos y compuestos fenólicos que sirven como antioxidantes.
Un motivo para echarlo en todas las comidas es que su fibra soluble como la pectina y sus fitonutrientes mejoran el sistema inmunológico. También, ayudan al intestino a absorber el hierro vegetal como el de los frutos secos y la legumbres.
Su alto contenido de vitamina C es un gran aliado para combatir enfermedades debido a sus efectos hepatoprotectores, antihiperglucémicos y antimicrobianos. Los expertos recomiendan que las personas con cálculos en la vesícula y el riñón consuman esta fruta.
Otro beneficio que tiene el limón es que disminuye el colesterol malo protegiendo la salud cardiovascular. En temas de su consumo, los científicos desmienten que mezclar agua con este cítrico ayude a la salud es más, debilita el esmalte dental.
Por otra parte, es muy común echarlo en las comidas, hacer bebidas como la limonada y en la repostería. Algunos son más valientes y deciden comerlo directamente de a bocados como si fuera una naranja aunque no sea tan frecuente ver eso. En caso de tener dudas en incluirlo en el algún menú, es recomendable consultar a un profesional.
Fuente: TN