Grisexualidad, otra manera de tener intimidad

SEXUALIDAD Ivana ALFARO
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Las dimensiones sexuales de las personas suelen ser complejas, van mucho más allá del blanco y negro y, precisamente, esta última afirmación es perfecta para comenzar a hablar sobre la grisexualidad, que es independiente de la orientación sexual, ya que, dentro del grupo de personas que se identifica grisexual hay heteros, gays, lesbianas o queers.

Este término procede de la palabra “gris” y define a las personas que no son asexuales, pero que tampoco viven la sexualidad de la forma considerada como “tradicional”. En muchas ocasiones, están más cercanos a la asexualidad, dado que son personas que, en el caso de que se sientan atraídas por alguien, el sexo no suele tener un papel muy importante en la relación y solo se sienten atraídas sexualmente en contadas ocasiones.

“El espectro de la asexualidad al que pertenece el grisexual, es relativamente nuevo y, por lo tanto, no existe aún una definición única y universal”, comentó la psicóloga española Anais García.

Características de las personas grisexuales
Por su propia naturaleza, no existe una lista cerrada de características o comportamientos de las personas grisexuales, pero García indicó que sí es cierto que para ser considerada como grisexual, tiene que cumplir ciertas condiciones:

No sentir habitualmente un impulso sexual hacia otras personas.
Sentirlo solamente por algunas personas y en unas determinadas circunstancias.
Además, la especialista planteó tres preguntas clave para despejar dudas sobre si una persona es grisexual o no:

¿Alguna vez en tu vida sentiste atracción física por alguien?
¿Cuál fue la última vez que sentiste atracción por otra persona?
¿Hay algún patrón que se repita en las ocasiones en las que encuentras atractivo/a a alguien?
La grisexualidad y la orientación sexual

La grisexualidad es independiente de la orientación sexual. De hecho, en 2015, la entidad The Ace Community Survey, publicó el primer Censo Asexual, en el que se preguntó a la personas asexuales o dentro del espectro gris de la atracción sexual, sobre cómo se identificaban.

La mitad de ellas se reconoció como heterosexual o como grisexual, mientras que un 16,6% lo hizo como queer (se relaciona con una identidad sexual o de género que no corresponde a las reglas establecidas de sexualidad y género), un 12,5% como bisexual, un 11,2% como pansexual (la atracción sexual, romántica o emocional hacia otras personas es independientemente de su sexo o identidad de género), un 3% como lesbiana y un 2,8% como gay.

Los grisexuales pueden tener una relación romántica, ya que, el sexo y el amor o romanticismo están relacionados, pero no están necesariamente unidos. De hecho, con el romanticismo se pueden hacer las mismas divisiones que con el sexo. Existen personas:

Arrománticas, que no experimentan ningún tipo de atracción romántica.
Grisrrománticas, que la experimentan a veces
Heterorrománticas, que la experimentan solo hacia personas de diferente género.

La grisexualidad y las relaciones
Si estás en una relación y descubrís que sos grisexual, la comunicación es la clave. Es necesario que hables sobre el tema con tu pareja, que le expliques bien lo que está pasando y que juntos lleguen a tener algún tipo de acuerdo respecto a las necesidades desde el punto de vista sexual.

Hay que tener en cuenta que existen actividades que pueden ser alternativas satisfactorias al sexo, como los masajes o las caricias y que, hasta en las parejas más convencionales, hay desajustes en la necesidad y el tipo de relaciones sexuales, y que la única forma de que esos desequilibrios no se conviertan en un problema a largo plazo es que se hablen las cosas, llegando a acuerdos y compromisos.

Fuente: TN

   

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