Coronavirus: una nueva ola traería un “tsunami” para la salud mental

SALUD Ivana ALFARO
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Las noticias sobre la pandemia giran en torno a los fallecidos, el sistema de salud, las vacunas y los avances en las investigaciones. Sin embargo, aún no llegamos a notar la dimensión de los trastornos de salud mental de las poblaciones.

En el reciente Congreso Nacional de la Sociedad Española de Medicina General y de Familia, se encendió la alarma y algunos profesionales hablaron de un “tsunami” de la salud mental, que podría llegar en la próxima ola.

“Se ha definido la cuarta ola de esta pandemia como la ola de la salud mental. Pero es más bien un tsunami que va a requerir muchos esfuerzos. Los factores de riesgo que se conocen pueden estar relacionados con los trastornos depresivos y de ansiedad: aislamiento, miedo, incertidumbre, ‘sobreinformación’ negativa…”, expuso durante el congreso Miguel Alfonso García Escudero, psiquiatra de la Unidad de Trastornos Bipolares del Hospital General y Universitario de la ciudad de Elche (España).

Además, el especialista apuntó que aumentó la prevalencia de la depresión, la ansiedad y el trastorno por estrés postraumático, a raíz de la pérdida de seres queridos y problemas de salud propios, en algunos casos con peligro de muerte.

“Los casos de depresión han aumentado considerablemente en la población adulta, pero especialmente en la infanto-juvenil en los que han aumentado los comportamientos autolesivos”, dijo el profesional, en declaraciones a La Gaceta Médica de España.

El fenómeno, según señala García Escudero, se ve reflejado en un aumento significativo en la prescripción de ansiolíticos y antidepresivos. Sin embargo, señaló que, al menos en el caso español, la automedicación no es un problema significativo. “En general, los psicofármacos requieren de prescripción médica y no es habitual que se puedan consumir sin la misma”.

El psiquiatra cree que, en muchos pacientes, no es fácil establecer los límites entre la depresión y la ansiedad. “Por mi experiencia, en la mayoría de pacientes atendidos en los primeros estadios de la enfermedad no está delimitado dónde empieza la depresión y acaba la ansiedad y, además, manifestarán unas veces síntomas más acusados en un extremo y, en otras ocasiones, en el otro y, más aún, se desplazarán desde uno al otro, con más frecuencia desde la ansiedad a la depresión”, afirmó el médico.

Otro de los temas de consulta frecuente es el “embotamiento emocional”, como una parte del proceso evolutivo de la depresión. “Es una atenuación o aplanamiento de las emociones, tanto las positivas como las negativas”, dijo en una nota a Europa Press el médico Lorenzo Armenteros, del Centro de Salud Islas Canarias. La indiferencia a aspectos importantes de la vida, como el trabajo, los amigos y la familia, es uno de los indicadores, según Armenteros.

El panorama que trazan los profesionales españoles es similar al de muchos países del mundo. Una reciente investigación publicada por la revista The Lancet Psychiatry indica que uno de cada tres contagiados de covid presentaba secuelas neurológicas o psiquiátricas, en un universo de 230.000 casos analizados durante los seis meses posteriores a la infección.

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