¿El sushi podría boicotear la balanza?

A qué te enfrentas al comer sushi
Si te pones detenidamente a mirar un menú japonés, te podrás dar cuenta que existen pocas opciones a elegir (maki: rollitos de pescado, vegetales, arroz enrollado en algas, sashimi: pescado crudo y nigiri: pescado crudo sobre arroz). Pero hablando nutricionalmente, es complicado el poder agrupar todos los rollitos, ya que existe una amplia variedad. Sin embargo, los panecillos, el California roll, el rollo de aguacate y la tempura de gambas proveen alrededor de unas 150 a 500 calorías. Pero la cantidad de grasas, carbohidratos y proteínas también van diferir, según el tipo de pescado y de más complementos.

Aunque uno de los mayores controles nutricionales del sushi es el sodio, esto debido a la salsa de soja y otros platos de miso que acompañan los rollos de sushi. Cabe señalar que los deportistas de resistencia tienden a perder sodio por medio del sudor y debe sustituir los electrolitos después de un arduo entrenamiento, por lo que tienen un margen a favor.

Estrategias para comer sushi y no morir en el intento
Es complicado dejar el sushi de lado. Pero quizás de las mejores estrategias para poder obtener un sushi saludable es centrarse en el tamaño de la porción. Así que se puede disfrutar, siempre y cuando no se haga un hábito el comer a cada rato. También es fácil incorporar vegetales frescos a una comida sushi.

Los productos frescos son una buena fuente de potasio y en realidad puede resultar benéfico para contrarrestar los efectos de una dieta alta en sodio. Y aunque la salsa de soja es alta en sodio, los deportistas de resistencia pierden electrolitos con el sudor, por lo que les va bien un incremento de sodio.

Así que para la siguiente ocasión que vayas a comer sushi, es preciso considerar todo esto para puedas disfrutar sin que resulte contraproducente.