Brad Pitt tiene prosopagnosia, un mal neurológico poco frecuente y sin cura

Se calcula que en mayor o menor grado la sufre una de cada 50 personas.

SALUD Julia VOSCO
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Malena Guinzburg y Victoria de Suecia son otras famosas que también sufren este extraño trastorno que impide recordar las caras conocidas, incluso las de los familiares más íntimos, porque el cerebro no es capaz de interpretar la señal que recibe del sentido de la vista.

Hay dos clases de prosopagnosia:

- La prosopagnosia adquirida, que es el resultado de un daño cerebral causado por una lesión en partes del cerebro que controlan el reconocimiento facial

- La prosopagnosia del desarrollo, que afecta a las personas con ceguera facial desde el nacimiento, surge por una interrupción en la comunicación entre las diferentes partes del cerebro.

En una entrevista concedida a la revista Esquire, Brad Pitt afirmó que tenía dificultad para reconocer los rostros de las personas que conocía, y que éstas se lo tomaban como una ofensa cuando les preguntaba de dónde se conocían. También señaló su intención de examinarse. La Universidad de Carnegie Mellon en EE.UU. le ofreció a Pitt consutar con Marlene Behrmann, psicóloga y miembro del centro para la Base Neural de Cognición de la universidad.

La causa parece ser una anomalía en el análisis facial que se realiza en el giro fusiforme, es decir en la zona cerebral en la que se encuentra el modelo estándar de rostros con el que comparamos cada nueva cara. Un ejemplo es la lucha de los occidentales por reconocer a los orientales porque son diferentes del modelo.

El neurólogo Adrián Arés Luque, experto del Complejo asistencial Universitario de León, remarca que lo raro es que el paciente es capaz de decir que un rostro es un rostro, es decir identifica la cara como tal, pero no es capaz sumando todos los rasgos de identificar al familiar o conocido por su rostro, aunque si es capaz de recordar las características propias de estos allegados, como la voz, la postura corporal o el olor.

Si bien no existe tratamiento específico para la cura, se están desarrollando programas de entrenamiento para ayudar a mejorar el reconocimiento facial. En los casos graves de prosopagnosia algunas personas no pueden reconocer ni su propio rostro en un espejo.

 

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